martes, 13 de mayo de 2008

miedo

miedo.

(Del lat. metus).


1. m. Perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario.

2. m. Recelo o aprensión que alguien tiene de que le suceda algo contrario a lo que desea.

En esta ocasión el DRAE no es poético, pero sí perturbadoramente certero. Como los miedos ridículos que dejamos que manden en nuestras vidas. La definición es tan transparente que detrás de las palabras se intuyen los miedos particulares del redactor, sobre todo en la segunda entrada. Los escondemos a los ojos ajenos. Nos negamos a verlos. Los encerramos en nuestro desván oscuro del alma. Y dejamos que desde allí vayan tejiendo su tela de araña, sutil, aterciopelada. Somos fuertes. Somos divertidos. Somos listos y seductores. Pero ellos mandan, desde la sombra, mucho más de lo que estamos dispuestos a admitir. Por eso yo no soy yo, sino lo que mis miedos escondidos me dejan ser.

4 comentarios:

Vulcano Lover dijo...

Vivir desde el optimismo implica no vencer los miedos, sino asumirlos, y vivir con ellos, como vivimos con nuestros gustos musicales, estéticos o con nuestras afinidades o nuestras fobias. Vivir sin que nos paralicen, encontrando el compromiso más amplio posible con nuestra propia e íntima libertad.

Te echo de menos.

Manu dijo...

Y a qué tienes tú miedito?

mikgel dijo...

Vulcano: Eso o todo lo contrario. Si una característica esencial tienen los miedos es que no es fácil adaptarlos a un convencionalismo, ni racionalizarlos, ni explicarlos discursivamente.

manu: de casi tantas cosas como tú, o más.

Carlitos Sublime dijo...

Joder, qué familiar me resulta todo. El miedo, el vértigo que muchas veces lo anticipa... en fin, tal vez sea cuestión de sobrellevarlo y al mal tiempo buena cara. Pero siempre están ahí, o por lo menos en mi caso.

Un besote, nos vemos pronto.

Carlitos

 
Locations of visitors to this page